Por el empleo
La actividad en los centros de trabajo se resiente por la huelga en la sanidad asturiana
Segunda jornada de huelga en la sanidad asturiana. Las consultas, intervenciones quirúrgicas y pruebas diagnósticas se están viendo afectadas por los paros convocados por SATSE Asturias, junto con USAE, SICEPA/USIPA, CCOO y UGT, ante el inmovilismo de la Administración autonómica y su negativa a negociar una mejora en el Acuerdo de regulación de jornada ordinaria. La huelga, que comenzó ayer martes, 17 de octubre, tendrá diez días de duración y tiene por finalidad la defensa del empleo en el sector, ya que el planteamiento de la Administración supone un recorte de cerca de 500 puestos de trabajo, muchos de ellos de enfermeras.
En este escenario de huelga, tal como explica Margot Marqués, secretaria general de SATSE Asturias, “la actividad se está viendo resentida”, tanto en la atención primaria como en especializada. “No pretendemos entrar en una guerra de porcentajes de seguimiento con la Administración, si bien desde SATSE sabemos que la huelga está teniendo una incidencia importante en los centros de trabajo, la actividad ordinaria programada se está viendo afectada, no así la urgente ni la preferente”, concreta Marqués.
La huelga que vive hoy martes su segunda jornada se prolongará hasta el 6 de noviembre, con paros los días 18, 19, 22, 23, 30 y 31 de octubre y 5 y 6 de noviembre. La reunión de última hora a la que los sindicatos fueron llamados el lunes por el Servicio de Salud del Principado (SESPA) no permitió acercar posturas y finalmente se mantuvo la convocatoria de paro. Tras otros intentos previos de negociación y medidas de presión como un encierro sindical de 30 días en el edificio del SESPA, ha sido inevitable recurrir a los paros.
Desde el sindicato de enfermería consideran que el acuerdo de regulación de jornada es altamente lesivo para el empleo y, por consiguiente, para la calidad asistencial que se presta al ciudadano. Tal como está planteado, los trabajadores asturianos trabajarán más horas que en otras comunidades autónomas al mismo tiempo que se ponen en peligro cientos de puestos de trabajo.
Los sindicatos piden el mantenimiento del empleo público y que las condiciones de trabajo del turno nocturno sean menos lesivas que las plateadas por el Principado. Se reclama un turno rotatorio que no implique trabajar una media de 60 horas más que los trabajadores de otras comunidades autónomas y un turno diurno que permita la aplicación de las 37,5 horas semanales.