Críticas de la sección sindical del área sanitaria IV
SATSE denuncia el funcionamiento del Centro de Salud de La Fresneda y el cierre de camas en el HUCA
El funcionamiento del Centro de Salud de La Fresneda y el cierre de camas en el Hospital Universitario Central de Asturias (HUCA) son dos asuntos que preocupan al SATSE en el área sanitaria IV.
Irregularidades en La Fresneda. Con fecha de 16 de mayo, los trabajadores de este centro de salud remitieron al gerente de Atención Primaria un escrito poniendo de manifiesto diversas disfunciones que vienen ocurriendo en las instalaciones y que derivan en una vulneración de los derechos del usuario en cuanto a la protección de datos clínicos. Al parecer, estos hechos no parecen preocuparle al Gerente, que no ha respondido a los trabajadores ni a su máximo representante, la Junta de Personal, que el pasado día 6 solicitó una reunión para analizar el tema, petición a la que sólo se ha respondido una vez convocada la rueda de prensa en la que se han denunciado estos hechos.
Cierres de unidades en el HUCA. Los cierres de unidades de hospitalización y de quirófanos se están produciendo de una forma abusiva, ya que las listas de espera siguen siendo muy voluminosas y las urgencias no disminuyen.
Este mes de julio se ha cerrado una de las unidades de Medicina Interna y, en muchas ocasiones, los pacientes pendientes de ingreso tienen que esperar hasta un día y medio en una zona de urgencias destinada a estancias de escasas horas, por lo que las condiciones no son las adecuadas para permanencias más prolongadas.
Otro área en la que la situación es preocupante es Pediatría, una de cuyas unidades –la correspondiente a los lactantes, niños de un mes a dos años- se ha cerrado hace más de un año. Con este cierre se ha conseguido el hacinamiento en una unidad destinada a niños de mayor edad. Las condiciones son muy malas, en habitaciones pequeñas de tres camas, con los correspondientes sillones para los padres y todas las dificultades para el buen manejo y la realización de los cuidados por parte del personal, que también sufre las consecuencias de la precaria organización.
Desde el SATSE se denuncia también que, si las previsiones no cambian, se realizará un nuevo cierre en próximos días, que afectaría a una nueva unidad pediátrica, quedando todos los niños de entre un mes y 14 años en una única unidad. Hace años se renovó íntegramente el área de Pediatría para dividir las unidades que ahora se están eliminado en las más pésimas condiciones.
En cuanto a la cirugía pediátrica, este verano se ha ampliado también al mes de julio el cierre de un quirófano que en años anteriores sólo cerraba en agosto. Paradójicamente, la lista de espera, que supera sobradamente los cinco meses, se está intentando corregir con los programas especiales (“peonadas”) que se desarrollan por las tardes y que tienen un sobrecoste añadido.